Call of Duty: Black Ops 7 quedó muy lejos de ser el éxito que Activision esperaba. El juego presentó una de las peores campañas en años y magnificó las críticas contra sus responsables. Los fanáticos tienen motivos de sobra para creer que la saga ha perdido su norte, tras una consecución de entregas carentes de inspiración y hechas a los apurones. Pero la cosa promete cambiar para mejor tras el anuncio de un importante giro en la estrategia de la franquicia.
A través del blog oficial de Call of Duty, se anunció que en el futuro ya no lanzarán juegos consecutivos de las sagas Modern Warfare y Black Ops. Es evidente que Activision (y Microsoft) han comprendido que el experimento de los últimos cuatro años no ha dado los resultados buscados. También, que los fanáticos ya no están dispuestos a avalar absolutamente todo lo que se haga con CoD, sin importar cuán fieles son a la propiedad intelectual.
Esto significa que Activision no piensa repetir lo que ocurrió con sus últimos estrenos back to back. Para ser más específicos, con Modern Warfare 2 (2022) y Modern Warfare 3 (2023), y más recientemente con Black Ops 6 (2024) y Black Ops 7 (2025). La intención de la compañía es variar el calendario de estrenos de Call of Duty para recuperar el nivel que supo ostentar.
En el anuncio no se brindaron motivos demasiado específicos respecto de este cambio de estrategia. De todos modos, la firma detrás de Call of Duty prometió brindar detalles en el futuro sobre cómo planea abordarlo.
“Ya no lanzaremos juegos de Modern Warfare o Black Ops consecutivos. Hay muchas razones, pero la principal es garantizar una experiencia absolutamente única cada año. Impulsaremos una innovación significativa, no incremental. Aunque no compartimos estos planes hoy, esperamos hacerlo cuando llegue el momento oportuno”, mencionó.
Call of Duty ya no lanzará juegos consecutivos de Modern Warfare y Black Ops
Después del aclamado Modern Warfare 2 de 2022, Call of Duty sufrió un importante traspié con Modern Warfare 3, que se lanzó un año más tarde. Las principales críticas se enfocaron en su campaña, que no solo era breve, sino que se sentía desarrollada con demasiada premura. Luego Activision quedó en el ojo de la tormenta cuando salió a la luz que los desarrolladores habían sido presionados a terminar el juego en apenas 16 meses.
Con Black Ops 6 y Black Ops 7 sucedió algo muy parecido. El primero generó gran expectación, especialmente por su historia enfocada en el contexto de los años noventa, aunque las críticas finales fueron mixtas. Mientras que con la entrega más reciente de Call of Duty todo parecía dado para que pasara por el mercado con más pena que gloria. Desde que se presentó por sorpresa en el Xbox Games Showcase de junio, el público se repartió entre la indiferencia y el temor a que se repitiera el fiasco de MW3.
Finalmente, BO7 debutó con críticas mayormente negativas a su campaña, aunque con una buena recepción para su multijugador. Lo cierto es que Activision finalmente ha optado por cambiar su estrategia y no recaer en los errores de este último tiempo. Lo cual es muy bueno, sin dudas.
“Para ser claros, el futuro de Call of Duty es prometedor y creemos que nuestro mejor momento está por venir, dada la profundidad y el talento de nuestros equipos de desarrollo. Hemos estado construyendo la nueva era de Call of Duty, y ofrecerá justo lo que buscan, junto con algunas sorpresas que impulsarán la franquicia y el género”, indicaron desde Activision. Lo que todavía es un misterio es si la compañía continuará apostando con una nueva entrega por año, o si comenzará a espaciarlas.
