El pasado lunes , 17 de noviembre, dos osteópatas de la Academia de Osteopatía Thuban, de Madrid, acudieron a la academia de Operación Triunfo para dar un taller de automasaje a los concursantes. La visita ha sido muy comentada en redes sociales por dos motivos. En primer lugar, por el comentario fuera de lugar de uno de los osteópatas hacia Cristina y, en segundo lugar, por el hecho de que, pudiendo llevar a dos fisioterapeutas, hayan optado por una pseudoterapia como la osteopatía.
Operación Triunfo se promociona como una experiencia completa en la que los concursantes no aprenden solo a cantar y bailar. También atienden a todo tipo de clases y talleres donde se les habla desde nutrición hasta psicología. Teniendo esto en cuenta, que unos profesionales hayan ido a enseñarles a corregir su postura y darles algunas claves de automasaje no suena del todo descabellado. El problema es justo el que se critica en redes sociales. Que la osteopatía está en el punto de mira del Ministerio de Sanidad por su relación con las pseudoterapias y sus prácticas cuentan con muchas directrices que normalmente no se cumplen.
OT es un programa con un gran altavoz, por lo que darle parte de esa difusión a la osteopatía, con todas sus sombras, ha sido un error. Por no hablar de lo de Cristina. Pero vamos a empezar por el principio.
¿Por qué la osteopatía se considera una pseudoterapia?
La osteopatía es una disciplina que se basa en la manipulación física de los músculos y los huesos para conseguir beneficios a muchos niveles. No solo promete sanar determinadas lesiones, también se supone que ayuda a tratar multitud de enfermedades. Aunque, en el ámbito de la fisioterapia, normalmente se basan solo en lo primero.
Su popularidad y su reconocimiento más o menos alejado del ámbito de la sanidad varían mucho de unos países a otros. En Estados Unidos, por ejemplo, se dividen en dos grupos: los osteópatas y los médicos osteópatas. Los primeros solo realizan manipulación muscular y esquelética para el alivio de lesiones, mientras que los segundos tienen un ámbito de acción mucho más amplio, considerándose como verdaderos profesionales sanitarios.
En cambio, en España, no solo no se les considera profesionales sanitarios, sino que la osteopatía forma parte de las técnicas en revisión para ser catalogadas como pseudoterapias. La decisión de incluirla en esta lista se basa en la ausencia de una evidencia científica sólida que la respalde. Algo que, por supuesto, debería tener cualquier técnica que se emplee para mejorar la salud de las personas.
¿Cuál es el problema de los osteópatas que hay ido a Operación Triunfo?
Al contrario que los osteópatas, los fisioterapeutas sí que están considerados profesionales sanitarios, según la Ley 44/2003, de ordenación de las profesiones sanitarias. Por ese motivo, las técnicas de osteopatía solo se consideran válidas científicamente si las lleva a cabo un fisioterapeuta titulado. Veamos el CV de los dos osteópatas que acudieron a la academia de Operación Triunfo.
Por un lado, tenemos a Jesús de Miguel, quien cuenta con las licenciaturas en medicina holística y medicina alternativa y la diplomatura en homeopatía, todas ellas certificadas en México, un país con una legislación distinta a la española en materia de profesiones sanitarias. Sobra decir que la homeopatía no cuenta con la más mínima evidencia científica. Y también sobre decir que, siempre que medicina vaya acompañado del adjetivo “holísitca”, lo mejor es salir corriendo.
Por otro lado, de Miguel tiene una carrera en Osteopatía y un máster en Osteopatía bajo Evidencia Científica y Práctica Clínica. Esto último ya suena bien, ¿no? ¡Evidencia científica! La cuestión es que ha cursado esta carrera en la Universidad Europea del Atlántico, una universidad privada asociada al centro de osteopatía que él codirige. Por lo tanto, no es un título oficial que lo certifique como profesional sanitario según lo establecido por el Ministerio de Sanidad.
En segundo lugar, ha acudido a la academia de Operación Triunfo el osteópata Samuel Cobo, cuya formación es muy similar: Título de Estudios Superiores de Osteopatía por la Universidad Europea del Atlántico, Máster de Formación Permanente en Osteopatía Bajo Evidencia Científica y Práctica Clínica por la Universidad Europea del Atlántico, Máster de Formación Permanente en Osteopatía Pediátrica, Gestación y Desarrollo por la Universidad Europea del Atlántico y Experto Universitario en Posturología Aplicada a Osteópatas por la Universidad Europea del Atlántico.
¿Qué pasa entonces?
Ninguno de los dos es fisioterapeuta. Por lo tanto, ninguno puede practicar la osteopatía desde una perspectiva clínica y con evidencia científica, basándose en los estándares del Ministerio de Sanidad. Sí que es cierto que cuentan con una certificación que acredita que su sistema de gestión es válido según la normativa europea para impartir una formación no reglada en osteopatía. Pero es algo que sigue fuera de lo establecido en España según el mencionado ministerio.
¿Qué pasó con Cristina?
Ya hemos visto que Operación Triunfo ha dado su inmenso altavoz a dos personas que practican técnicas sin evidencia científica. Pero, increíblemente, eso no ha sido lo peor. Lo peor ha sido el comentario de uno de ellos cuando estaba indicando a una concursante de 18 años cómo corregir su postura. “Se me van los ojos, eres muy guapa”. Un señor que sobradamente podría ser su padre, en vez de centrarse en lo que se supone que había ido hacer, hizo un comentario totalmente fuera de lugar y carente de la más mínima profesionalidad. Un comentario que, por supuesto, también ha hecho arder las redes.
Está genial que Operación Triunfo opte por ampliar la experiencia de sus concursantes con clases y talleres variados. Pero deben recordar que con la salud no se juega. España está llena de grandes profesionales sanitarios, muchos de ellos fisioterapeutas estupendos. No tenía sentido elegir a dos personas que no son sanitarios y que, para colmo, hicieron un comentario casposo que no se debería tolerar, ni delante de las pantallas ni detrás de ellas.
