Como cada mes de diciembre, ya tenemos aquí las gemínidas, una lluvia de estrellas bastante infravalorada en el hemisferio norte, posiblemente por la época tan fría en la que alcanzan su máximo. De las perseidas podemos disfrutar en verano sin ningún abrigo, pero para salir por la noche a ver las gemínidas hay que tener más valor. Aun así, el espectáculo vale la pena.
Si bien esta lluvia de estrellas comenzó a ser visible el 4 de diciembre y seguirá viéndose hasta el 17 de este mes, su momento álgido tendrá lugar este fin de semana, en la madrugada del sábado 13 al domingo 14 de diciembre. En ese momento, la Luna, en fase menguante, estará iluminada en un 39 %, por lo que, si bien puede entorpecer algo, no enturbiará demasiado el espectáculo.
No en vano, las gemínidas son una lluvia muy intensa, con hasta 150 meteoros por hora. Por eso, es muy difícil salir a mirar durante unas horas y volver a casa sin haber visto ninguno. Eso, junto a la intensidad de sus colores, que a veces brillan en tonos verdosos, la convierte en la que para muchos es la lluvia de estrellas más especial del año.
¿De dónde vienen las gemínidas?
Como cualquier lluvia de estrellas, las gemínidas proceden de los escombros de un objeto con el que la Tierra se cruza cada año. Al atravesar nuestra atmósfera, se queman y los vemos como pequeñas bolas de fuego. No son estrellas como tal, aunque nosotros las visualicemos como estrellas que caen del cielo.
En el caso de las gemínidas, el objeto en cuestión es el 3200 Phaeton, un cuerpo que tiene propiedades tanto de asteroide como de cometa, por lo que difícilmente puede catalogarse solo en una de las categorías.
¿Cómo podemos ver esta lluvia de estrellas?
Para ver una lluvia de estrellas, sea la que sea, el primer paso es alejarnos de la contaminación lumínica. Desgraciadamente, esto es cada vez más difícil, pues la iluminación de las ciudades llega más y más lejos.
Una vez hecho esto, se puede mirar a cualquier punto del cielo, aunque la radiante de las gemínidas es la constelación de Géminis. Eso significa que parece que nacen en ese punto, aunque en realidad puedan verse en cualquier parte. Basta con fijar la vista en un punto y esperar a que los ojos se adapten a la oscuridad.

En cuanto a la hora, a partir de las 22:00 en España comenzarán a ser visibles, aunque habrá más meteoros por hora mucho más tarde en la madrugada. Si tienes mucho abrigo, vale la pena esperar.
Hecho todo esto, solo queda esperar y disfrutar del espectáculo. Si por lo que sea no puedes verlo en la noche del 13 de diciembre, recuerda que estarán visibles hasta el 17. Irán perdiendo intensidad, pero seguro que puedes ver unas cuantas cada noche. Y si aun así te la pierdes, siempre te quedarán las cuadrántidas, otra lluvia de estrellas que, a pesar de ser menos intensa y coincidir su máximo con una Luna llena, también nos regalará algún bonito espectáculo. Su máximo será ya en enero, el día 2.

