En Materialistas, Nueva York es mucho más que la ciudad de fondo en que transcurre la historia central. También, es un escenario de ensueño en que cada personaje puede aspirar a alcanzar una meta transcendental. Por lo que para Lucy (Dakota Johnson), una casamentera que está convencida de haber encontrado la fórmula ideal para el romance, es un escenario idílico. La nueva cinta de Celine Song dedica tiempo e interés a explorar, entonces, en la vida de los solteros en la Gran Manzana. También, como la realidad puede ser definitivamente muy distinta a las aspiraciones de buena parte de sus personajes.
Por supuesto, la premisa no es del todo original y la misma Celine Song reconoció su inspiración al momento de escribir y posteriormente dirigir la cinta. La cual no es otra que Sexo en Nueva York, la emblemática serie de HBO que durante seis temporadas reflexionó sobre el amor contemporáneo. De hecho, según una entrevista a la realizadora en IndieWire, el tono general de la producción, le permitió pulir sus propias ideas para la cinta. Algo que incluye el papel del privilegio, el dinero y la riqueza a la hora de amar.
Un tema complicado y sensible que Materialistas toca con cuidado y de la misma manera que la historia de Carrie Bradshaw (Sarah Jessica Parker). Para Celine Song, Sexo en Nueva York resumió las inquietudes de una generación de mujeres y convirtió a la ciudad, en epicentro de una vida idílica e irreal, que la serie desmonta de a poco. Un giro que también explora la cinta. Lucy debe enfrentar las ambiciones que sueña cumplir en Nueva York, pero también, que se encuentra en desventaja con respecto, por ejemplo, a sus acaudaladas clientas. Lo que hace que deba replantearse lo que cree sobre el romance — y su lado más práctico — y su versión sobre enamorarse.
Un relato que marcó una época y que inspiró ‘Materialistas’
Celine Song no ha dudado en admitir que Sexo en Nueva York fue la pionera en muchos de los temas principales que se profundizan en su cinta. En especial, en la forma en que la vida romántica que se relata en la producción, se convirtió en una aspiración para las solteras de todas partes del mundo. Para la cineasta y guionista, la idea de una mujer trabajadora que emplea su talento de forma poco convencional para salir adelante, también procede la serie de HBO.
Como se recordará, la icónica Carrie, era una columnista que lograba sobrevivir en Nueva York, gracias a su talento. Más en específico, a la popularidad de sus extensas y detalladas narraciones acerca de la vida de cuatro mujeres solteras en busca del amor. Lucy, es una casamentera que tiene el dinero justo para vivir en la ciudad, pero que utiliza su perspicacia como casamentera para salir adelante. Las comparaciones son obvias y para Celine Song, ambas conducen al mismo lugar: como ser mujer en una época complicada.
“Hay un elemento con el que siempre te identificas, y luego también te enamoras de la ciudad de Nueva York a través de la serie. Descubres todo sobre adónde quieres ir” explicó la directora. Además, Song elogió la producción por jamás ser moralizante ni tampoco, criticar las, en ocasiones, disparatadas decisiones de las protagonistas. Lo que permitió la llegada a la cultura pop de un nuevo tipo de heroína románica. Una especialmente consciente de su lugar en el mundo y lo que desea para el futuro.
Amar y ser amado en una ciudad complicada
En Materialistas, además, la ciudad de Nueva York no deja de ser una región de ensueños llena de posibilidades. De hecho, para Lucy — como antes lo fue, para Carrie — todo esfuerzo es necesario y válido para continuar en la ciudad. Pero más que eso, la llamada Capital del Mundo se convierte, de una u otra manera, en el centro de todos sus deseos. Tanto a futuro, por lo que puede significar para su vida profesional y emotiva.
Y claro está, son evidentes las similitudes entre Harry (Pedro Pascal) y John James Preston/Mister Big (Chris Noth). Ambos son adorables, inalcanzables y el símbolo de una ciudad irreal, llena de lujos y promesas. También, del hombre perfecto que podría existir en medio de los fracasos amorosos y el miedo al futuro. Todos temas que Celine Song aborda en Materialistas y que convirtieron a la película, en una de las mejores del año.
