Bill Gates ha cambiado de rumbo. Tras casi dos décadas de luchar contra el cambio climático, el cofundador de Microsoft dio un giro inesperado y pidió a los países y organizaciones que inviertan en otras iniciativas. Gates afirmó que el cambio climático no acabará con la humanidad, por lo que los recursos deberían reorientarse a esfuerzos para combatir las enfermedades y el hambre.
En un ensayo publicado en su blog, Bill Gates ha soltado una bomba que pocos esperaban. El magnate dijo que el cambio climático es serio, mas no apocalíptico como muchos creen. Si bien sus efectos tendrán consecuencias graves en los países más pobres, las olas de calor y las tormentas provocadas por el aumento de temperatura no destruirán a la civilización.
Según Bill Gates, las personas podrán vivir y prosperar en la mayoría de los lugares de la Tierra, y aunque el mundo no alcanzará las metas de los Acuerdos de París, la innovación permitirá que la humanidad se adapte en los próximos 75 años. El antiguo jefe de Microsoft cree que con las políticas adecuadas, las emisiones disminuirán más; sin embargo, la comunidad climática debe alejarse de sus objetivos actuales y centrarse en el bienestar humano.
“El cambio climático, las enfermedades y la pobreza son problemas cruciales. Debemos tratarlos en proporción al sufrimiento que causan”, dijo Gates. El magnate mencionó que la métrica primordial es mejorar vidas y debería contar más que las emisiones y el cambio de temperaturas. “Nuestro objetivo principal debe ser prevenir el sufrimiento, particularmente para aquellos en las condiciones más difíciles que viven en los países más pobres del mundo”, añadió.

El cambio climático no es la mayor amenaza del mundo, afirma Bill Gates
Bajo la óptica de Bill Gates, el cambio climático no es la mayor amenaza que enfrentan estos países, sino la pobreza y la enfermedad. El millonario estadounidense criticó las políticas actuales para reducir emisiones, puesto que suelen tener prioridad sobre otros esfuerzos para mejorar el bienestar de las personas.
Gates puso como ejemplo un país de bajos ingresos que prohibió los fertilizantes sintéticos en un esfuerzo por combatir el calentamiento global. Esto generó una caída en el rendimiento de las cosechas, lo que se tradujo en escasez de alimentos y aumento de precios. “A veces, el bienestar humano pasa a un segundo plano frente a la reducción de emisiones, con malas consecuencias”, mencionó.
El cambio de postura de Bill Gates se da en un momento en que algunos líderes mundiales se alejan de sus objetivos climáticos. El canciller alemán, Friedrich Merz, prometió hace unos días que instaría a la Unión Europea a dar marcha atrás a la política que prohíbe que se vendan coches con motores de combustión después de 2035. Esta ley, aprobada en marzo de 2023 por todos los países de la UE, ya fue cuestionada por la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, quien afirma que es autodestructiva en cuestiones industriales y ambientales.
Bill Gates pidió a los asistentes de la COP30 en Brasil que reconsideren las inversiones y esfuerzos que se hacen en materia de cambio climático. El millonario advirtió que el crecimiento económico de los países pobres está ligado a la salud pública. Este crecimiento reducirá las muertes climáticas a la mitad, por lo que “cuanto más rápido las personas se vuelvan prósperas y saludables, más vidas podremos salvar”.

